La revista mexicana Tinta seca de arte y cultura de septiembre - octubre del 2006 ha dedicado cuatro paginas a los y las poet@s saharauis. Os enviamos un artículo de la profesora y escritora Francesca Gargallo.
Un trabajo que hará llegar a los mexicanos un poco de la bella poesía saharaui.
FRANCESCA GARGALLO –POEMAS-
UN ACERCAMIENTO A LA POESÍA
SAHARAUI EN LENGUA CASTELLANA
Los poetas son los verdaderos creadores de los mitos. Ni los filósofos ni los sacerdotes pueden, en efecto, decir el todo de una manera tan sucinta como para explicar los sentimientos de asombro, de pérdida o de deseo que nos revelan como humanos. Querer saber es, en realidad, nuestro deseo más profundo: saber qué nos hace tan distintos e iguales, saber la metáfora y la historia íntima del mundo. Así la poesía expresa un único anhelo en cientos de expresiones particulares, pues se pliega a las condiciones de la vida y genera mitos distintos: el clima. La historia, las formas de amar, las condiciones del exilio y la resistencia son los ingredientes de una expresión propia.
Las y los saharauis, esos hombres y mujeres cuya sonrisa espejea el sol y cuya hospitalidad es proverbial, tienen una poesía que ha ido cambiando en los últimos treinta años debido a los avatares de su historia de lucha, atravesada por la invasión marroquí y el exilio. En efecto, el 27 de febrero de 1976, a las pocas horas de la declaración de independencia de la República Árabe Saharaui Democrática, el reino de Marruecos y Mauritania le declararon la guerra para hacerse de sus riquezas en fosfatos, pesca y petróleo. Desde entonces el español dejó de ser la lengua colonia para convertirse para muchas jóvenes en la lengua de sus estudios, particularmente en Cuba y en España. Eso es, para convertirse en la lengua de su deseo.
La historia saharaui hunde sus raíces en la noche de los tiempos, pudiendo reivindicar cierta continuidad desde la época de las culturas neolíticas africanas; a la vez que es muy reciente, hija de un movimiento nacionalista anticolonialista que cuaja apenas en la década de 1970. La lengua nacional saharaui, el hasanía, es de origen bereber y árabe, amén que contenga préstamos de lenguas occidentales, como el español. Cuenta con una tradición poética oral que se transmite de generación en generación y que sigue brotando en la boca de jóvenes pastores nómadas, músicos, militantes del Frente POLISARIO, periodistas, etcétera.
Cuando en 1884, España se adueñó de esa porción del Sahara que se extiende frente a las islas Canarias, el castellano se convirtió en la segunda lengua de muchos saharauis. Después de la invasión marroquí, la población que encontró refugio en el suroeste de Argelia y empezó a organizar sus formas de gobierno en el exilio, planeó los estudios de los jóvenes que terminaban la primaria en los campos de refugiados con base en la solidaridad irrestricta de Cuba y del pueblo español. El castellano adquirió así una característica latinoafricana que se vuelca en la expresión de los poetas que lo han escogido como vehículo de su creación de sentimientos míticos.
En 2005, un colectivo de escritores saharauis fundó en Madrid la “Generación de la amistad”, un conjunto de voces poéticas que se han convertido en una nueva plataforma de expresión de la cultura saharaui. Ocho hombres y una mujer expresan en castellano su protesta y denuncia de la difícil situación impuesta al pueblo saharaui desde la invasión marroquí. Despojados de casa y patria, gritan lo que sienten y al hacerlo construyen una balsa de versos para sobrevivir al naufragio en el océano de los recuerdos.
Poesía Saharaui. Tiris novia de poetas
Celebro este descubrir, encontrar, participar con los saharauis una sola verdad: que la poesía dice lo que de otra manera no sabríamos. Con la justa palabra, con belleza e intensidad, sin fingimiento.
ResponderEliminarEsta occidente dejando en la estacada al pueblo saharaui. Sencillamente ni les escuchan, no les atienden. El ninguneo, el silencio es una forma de violencia, es la perfección de la vileza, arma que se esgrime con malos limpias y corazón de roca y estiercol.
Me alegra haber pasado por aquí y haberos leído.
Un fuerte abrazo
Viktor Gómez
Valentinos